El pilates no es solo una moda pasajera; es una práctica que ha ganado popularidad en todo el mundo por sus increíbles beneficios para el cuerpo y la mente.
Si alguna vez has estado pensando en sumarte a esta tendencia, hoy te voy a dar diez razones de peso para que comiences a practicar pilates ¡hoy mismo! Pero antes, te explicaré brevemente qué es el pilates, en qué consiste y qué equipo básico necesitas para empezar.
¡No te lo pierdas!
¿Qué es el pilates y en qué consiste?
El pilates es un sistema de entrenamiento físico y mental desarrollado a principios del siglo XX por Joseph Pilates. Su creador lo definió como un método de «contrología», ya que la idea principal era usar la mente para controlar los músculos. De hecho, este deporte se centra en fortalecer los músculos profundos del abdomen, la espalda y el suelo pélvico, lo cual mejora la postura, el equilibrio y la flexibilidad.
El pilates se basa en principios como la concentración, el control, la precisión, la respiración y la fluidez de movimiento. Las sesiones de pilates pueden realizarse en el suelo, sobre una esterilla (conocido como pilates mat), o utilizando una serie de aparatos especialmente diseñados, como el “reformer”, la “Cadillac”, la silla y el barril, entre otros.
Este método es apto para personas de todas las edades y niveles de condición física, ya que los ejercicios pueden adaptarse para ser más fáciles o más difíciles, dependiendo de las necesidades y objetivos de cada persona. Ya sea que busques mejorar tu fuerza, aliviar dolores de espalda, tonificar tu cuerpo o simplemente relajarte, el pilates siempre tendrá algo para ofrecerte.
Además, uno de los aspectos que distingue al pilates de otras disciplinas es su enfoque en la respiración controlada. A través de la respiración consciente, se oxigena mejor el cuerpo, se libera tensión y se optimiza el rendimiento durante los ejercicios; al fin y al cabo, es un sistema de entrenamiento que trabaja tanto a los músculos como a la mente, creando un equilibrio perfecto entre fuerza y serenidad.
Otra característica clave del pilates es su capacidad para adaptarse a diferentes necesidades. Por ejemplo, existen variantes del método clásico como el pilates terapéutico, dirigido a personas con lesiones o limitaciones físicas, o el pilates deportivo, que complementa la preparación física de atletas en diversas disciplinas ¡existen ejercicios de toda clase!
¿Qué equipo se necesita para practicarlo?
Una de las grandes ventajas del pilates es que puedes empezar con muy poco. Si decides hacer pilates en casa, solo necesitas una esterilla o colchoneta (de preferencia antideslizante) que te proporcione el soporte adecuado para realizar los ejercicios en el suelo.
Asimismo, existen algunos accesorios que pueden complementar tu práctica, como bandas elásticas, pelotas de estabilidad, aros de pilates (o «magic circles«), y pesas ligeras. Estos elementos no son imprescindibles al inicio, pero a medida que avanzas en este deporte, pueden ayudarte a añadir variedad y dificultad a tus sesiones de pilates.
Por otro lado, si decides inscribirte en un centro de pilates, tendrás acceso a máquinas especializadas como el “reformer” o la “cadillac” que mencionábamos anteriormente y otros equipos que te permitirán realizar una amplia gama de ejercicios bajo la guía de un profesor.
Si decides dar el salto y probar pilates en un estudio, verás que la variedad de equipos disponibles es impresionante: cada máquina tiene un propósito específico y está diseñada para trabajar diferentes grupos musculares de manera controlada:
El “reformer”, por ejemplo, es una de las máquinas más populares. Está diseñada para realizar una gran variedad de ejercicios que mejoran la fuerza, la flexibilidad y el equilibrio. Además, su diseño la hace que apta tanto para principiantes como para expertos.
La “cadillac”, por otro lado, es una máquina que parece una mezcla entre una camilla y una estructura de barras. Es ideal para trabajar la fuerza y la estabilidad, permitiendo realizar movimientos asistidos que ayudan a perfeccionar la técnica.
La silla de pilates es otro aparato interesante. Aunque su tamaño es reducido, ofrece un entrenamiento intenso, especialmente para el “core” y la parte inferior del cuerpo.
Para acabar, el barril de pilates es perfecto para trabajar la flexibilidad y fortalecer la espalda, lo que resulta ideal para aquellos que pasan muchas horas en la oficina o quienes tienen problemas de postura.
Respecto a la ropa, es importante tener en cuenta que ésta debe ser cómoda y ajustada al cuerpo, para que te permita moverte con libertad y para que el profesor pueda ver la alineación de tu cuerpo. Además, normalmente, se practica descalzo o con calcetines antideslizantes.
10 motivos para que empieces hoy mismo.
Si aún tienes dudas sobre si el pilates es para ti, aquí tienes diez razones que te convencerán de ponerte en movimiento:
- Mejora tu postura.
¿Pasas muchas horas sentado frente al ordenador o encorvado mirando el móvil? Entonces el pilates es para ti. Según nos comentan los profesionales de Clínica Rafael Guerra, practicando este deporte fortalecerás tus músculos, lo cual nos ayudará a corregir desequilibrios posturales de forma efectiva. Con el tiempo, notarás cómo cambia la manera en la que te sientas y sentirás que caminarás más erguido ¡es genial!
- Aumenta tu flexibilidad.
No necesitas ser un contorsionista para empezar a practicar pilates, pero sí que notarás una mejora en tu flexibilidad desde las primeras sesiones. Los ejercicios de estiramiento y el enfoque en la fluidez de movimiento te ayudarán a liberar tensiones musculares y ganar amplitud de movimiento, lo cual es muy bueno tanto para tu vida diaria como para realizar cualquier otra actividad física.
- Fortalece tu “core”.
El “core”, o núcleo está compuesto por la zona abdominal, la espalda baja, los glúteos y los músculos del suelo pélvico; en este contexto, un “core” fuerte es esencial para mantener una buena postura, prevenir lesiones y mejorar tu rendimiento en otros deportes o actividades físicas, y para lograrlo, el pilates es lo mejor que hay.
- Alivia el estrés.
El pilates combina movimiento y respiración consciente, lo cual te ayuda a reducir los niveles de estrés y a mejorar tu bienestar mental. Al centrarte en la calidad de cada movimiento y en la coordinación con tu respiración, te adentras en un estado de concentración plena que te aleja de las preocupaciones diarias ¡lo cual nos viene bien a todos!
- Mejora tu equilibrio y coordinación.
A medida que envejecemos, es común perder un poco de equilibrio y coordinación; para prevenirlo, el pilates trabaja activamente en estos aspectos, ayudándote a mantener la estabilidad y a mejorar la coordinación entre mente y cuerpo.
- Apto para todas las edades y niveles.
Una de las mayores ventajas del pilates es su adaptabilidad: tanto si eres un principiante, como si ya tienes experiencia en el mundo del fitness, encontrarás ejercicios que se ajusten a tu nivel. Además, tus instructores podrán modificar los movimientos para hacerlos más fáciles o más complejos, dependiendo de tus necesidades y capacidades.
- Favorece la pérdida de peso.
Aunque el pilates no es un ejercicio cardiovascular de alta intensidad, puede ser un excelente complemento en un plan de pérdida de peso. Al fortalecer los músculos y mejorar tu postura, tu metabolismo se activa, y con una práctica diaria, notarás cómo tu cuerpo se tonifica poco a poco.
- Ayuda a prevenir lesiones.
El pilates se centra en la alineación correcta del cuerpo y en el fortalecimiento de los músculos estabilizadores. De esta forma, además de mejorar tu postura, también se reducirá el riesgo de sufrir lesiones, sin importar la actividad física que practiques.
Sin duda, esto es especialmente bueno para personas que ya han sufrido lesiones en el pasado, ya que los ejercicios pueden adaptarse para fortalecer las zonas afectadas sin sobrecargarlas.
- Aumenta tu energía.
Puede parecer contradictorio, pero realizar ejercicio como el pilates de forma regular, lejos de agotarte, te recarga de energía.
Esto ocurre debido a la combinación de respiración controlada y movimientos fluidos, ya que dicha combinación estimula la circulación sanguínea y oxigena tus músculos, lo cual te hace sentir revitalizado y con más energía para enfrentar el día.
- Es una práctica divertida y motivadora.
Por último, y quizá lo mejor, encontrarás que el pilates no es monótono; hay una amplia variedad de ejercicios y combinaciones que puedes hacer, lo cual mantiene la práctica interesante siempre que la realices. Además, cada sesión es una oportunidad para aprender algo nuevo sobre tu cuerpo y mejorar tus habilidades. Y si decides practicar en un centro, también tendrás la oportunidad de conocer a otras personas con intereses similares, lo que añadirá un interés social a tu rutina de ejercicios.
No importa si eres joven o mayor, si tienes experiencia en el ejercicio o si recién estás comenzando; el pilates siempre será bueno para ti, así que, ¿por qué esperar más? Prepara tu esterilla, ponte ropa cómoda y empieza a disfrutar de todos los beneficios que el pilates tiene para ti.
¡Tu cuerpo y tu mente te lo agradecerán!
